¿Qué hacer si se atasca un juguete sexual? - Guía práctica y segura
Índice
- Atraer al lector
- Por qué es importante este tema
- Comprender los riesgos
- Cómo retirar con seguridad un juguete atascado
- Cuándo buscar ayuda médica
- Consejos para evitar esta situación
- Preguntas más frecuentes (FAQ)
- Recursos adicionales para un juego seguro
- Conclusión: Abrazar la exploración segura
Atraer al lector
Este tema puede incomodar a algunas personas, pero es esencial hablar de él. ¿Qué ocurre si un juguete sexual se queda atascado dentro de tu cuerpo? Aunque se trata de una experiencia poco frecuente y a menudo alarmante, hay que abordarla con calma y consejos prácticos. Muchos principiantes, e incluso algunos usuarios experimentados, pueden tener dudas sobre cómo afrontar este tipo de situaciones. Sin embargo, con la información adecuada, es fácil mantener el control, reducir la ansiedad y resolver el problema de forma segura.
Por qué es importante este tema
La exploración y experimentación sexual con juguetes es una parte saludable de la vida de muchas personas. Pero conocer los riesgos asociados a ellos, sobre todo para los principiantes que pueden no saber mucho sobre juguetes sexuales, es crucial para la seguridad. La mayoría de los juguetes sexuales están diseñados para aumentar el placer, pero cuando se utilizan de forma incorrecta o sin la conciencia adecuada, a veces pueden causar problemas como atascarse. Si esto ocurre, es importante saber exactamente qué medidas tomar.
Explorar la salud sexual, ya sea a través de juguetes u otros medios, debe hacerse siempre con conocimiento y seguridad en mente. Este artículo te guiará paso a paso sobre qué hacer en tales situaciones, abarcando desde la comprensión de por qué un juguete podría atascarse hasta cómo retirarlo de forma segura, y cómo prevenir tales sucesos en el futuro.
Sección 1: Comprender los riesgos
Por qué se atascan los juguetes sexuales:
Cuando se utilizan juguetes eróticos, es raro que un juguete se atasque. Sin embargo, esto puede ocurrir debido a varios factores, como el diseño del juguete y la anatomía natural de tu cuerpo. La mayoría de los juguetes diseñados para el juego anal o prostático están pensados para encajar perfectamente en su interior, pero algunos pueden deslizarse más de lo esperado. Veamos algunas razones por las que esto puede ocurrir:
- Falta de base acampanada: La causa más frecuente de que un juguete se atasque es la falta de una base acampanada o de un asa de extracción. Los juguetes que carecen de estas características pueden deslizarse fácilmente hacia el recto, donde los músculos del esfínter se contraen a su alrededor, dificultando su extracción. Los juguetes para la próstata, en particular, suelen diseñarse sin las medidas de seguridad adecuadas, lo que los hace más propensos a deslizarse.
- Contracciones musculares repentinas: Nuestro cuerpo está dotado de músculos que ayudan a controlar las funciones corporales. En la zona anal, los músculos del esfínter se contraen de forma natural durante la actividad sexual, lo que puede hacer que un juguete se introduzca más profundamente en el cuerpo. Si estás practicando un juego sexual especialmente intenso, puedes aumentar inadvertidamente las contracciones musculares, lo que podría arrastrar el juguete hacia el interior.
- Excitación intensa o distracción: A veces, durante los momentos de mayor excitación o estimulación intensa, puede que tu atención se desvíe y no te des cuenta de que el juguete no se está retrayendo correctamente o de que lo has introducido demasiado profundo.
Visión general de la anatomía:
El canal anal y el recto están diseñados para ser flexibles y dar cabida a diversos objetos, pero el cuerpo también tiene formas de retener las cosas. El esfínter anal es un conjunto de músculos que se contraen y relajan para controlar el paso de los desechos. Estos músculos también pueden crear succión, lo que puede hacer que un juguete penetre más profundamente en el recto. Aunque esto puede resultar placentero, también supone un riesgo cuando un juguete no está diseñado con dispositivos de seguridad que impidan que se pierda.
Es importante tener en cuenta que el recto no tiene los mismos límites físicos o puntos de detención naturales que la vagina. Esto significa que los objetos pueden introducirse más adentro con poca resistencia, sobre todo si no tienen forma de ser recuperados fácilmente.
Particularidades del juego prostático y anal:
Los juguetes para la próstata están diseñados específicamente para alcanzar la glándula prostática, situada unos centímetros dentro del recto. Estos juguetes suelen ser curvos para facilitar el acceso a la próstata y suelen ser más pequeños que los típicos juguetes anales. Sin embargo, los juguetes prostáticos también pueden ser propensos a deslizarse si no tienen una base adecuada. Los juguetes anales, en general, requieren una atención especial debido a su potencial para deslizarse durante el uso.
A diferencia de los juguetes vaginales, que suelen ser más fáciles de recuperar porque el canal vaginal tiene más estructura, los anales pueden ser más difíciles de manejar, sobre todo cuando no hay un mecanismo de recuperación. Por este motivo, la seguridad es primordial cuando se practican juegos anales o prostáticos.
Sección 2: Cómo retirar con seguridad un juguete atascado
Si te encuentras en la desafortunada situación de que un juguete sexual se quede atascado en tu interior, a continuación te explicamos cómo manejarlo con cuidado y calma. Que no cunda el pánico. Aunque pueda parecer un problema grave, en la mayoría de los casos puede resolverse de forma segura y sencilla con un poco de paciencia y el enfoque adecuado.
La clave es mantener la calma:
Ante todo, mantén la calma. El pánico puede hacer que te tenses, empeorando la situación. Los músculos anales se contraen de forma natural cuando estás estresado o ansioso, y esto podría dificultar la recuperación del juguete. Así que respira hondo, mantén la calma y avanza con pasos claros.
Técnicas de relajación
Para prepararte para retirar el juguete, deberás relajarte tanto mental como físicamente. Aquí tienes algunas técnicas que puedes utilizar:
- Respiración profunda: Empieza por hacer respiraciones largas y profundas para calmarte. Inhala lentamente por la nariz, aguanta un momento y exhala lentamente por la boca. Repite este proceso varias veces para aliviar la tensión. Esto ayudará a que tus músculos se relajen, facilitando la extracción del juguete.
- Visualización: Visualizar el proceso también puede ser útil. Imagina que el juguete sale suavemente, sin dolor ni dificultad. Esto puede ayudarle a prepararse mentalmente y a reducir la ansiedad que puede provocar el intento de recuperar el juguete.
- Relajación muscular: Los músculos de la zona anal pueden tensarse debido al estrés o a molestias. Prueba a sentarte en el váter o en cuclillas, ya que estas posturas favorecen de forma natural la relajación de los músculos anales.
Cambiar de posición para facilitar la retirada
Posicionarse correctamente puede marcar la diferencia a la hora de extraer con éxito un juguete atascado. Algunas posturas abren la zona anal y permiten que la gravedad ayude en el proceso de extracción:
- En cuclillas: Ponerse en cuclillas puede ayudar a abrir el recto y facilitar la expulsión del juguete. Esta posición pone el cuerpo en una postura similar a la de defecar, lo que favorece la relajación de los músculos.
- Sentado en el retrete: Sentarse en el váter o en una posición en la que las rodillas estén más altas que las caderas también puede ayudar a facilitar la extracción del juguete. El acto de sentarse y relajarse también puede estimular contracciones similares a los movimientos intestinales que pueden ayudar a expulsar el juguete.
- Tumbado de lado: Otra opción es tumbarse de lado con las rodillas hacia el pecho. Esta posición ayuda a abrir el recto y puede proporcionar más espacio para que salga el juguete.
Pasos para una eliminación suave
Una vez que esté en la posición correcta, intente recuperar el juguete con suavidad. Haz movimientos lentos y deliberados. Si puedes alcanzar el juguete, intenta sacarlo con cuidado, sin forzar. No te arriesgues a causarle daños tirando con demasiada fuerza.
Si el juguete no está a tu alcance, o si sientes algún dolor o molestia, detente inmediatamente. Las acciones forzadas podrían provocar desgarros, hemorragias o lesiones. Escucha siempre a tu cuerpo, y si las cosas te sientan mal, no dudes en buscar ayuda profesional.
Qué evitar durante la extracción
- No utilices objetos afilados: No intente nunca extraer el juguete con tijeras, pinzas u objetos punzantes. Esto podría causar lesiones graves y provocar complicaciones posteriores.
- No lo fuerces: Si el juguete no sale con facilidad, no lo fuerces. Empujarlo o tirar de él con demasiada fuerza podría dañar los tejidos sensibles del interior de tu cuerpo.
- No demores la búsqueda de ayuda: Si has intentado retirar el juguete con calma y sigues sin poder recuperarlo, busca ayuda médica de inmediato. Cuanto antes abordes el problema, menos riesgos de complicaciones habrá.
Sección 3: Cuándo buscar ayuda médica
Aunque la mayoría de los casos de atasco de un juguete sexual pueden tratarse en casa, hay situaciones en las que es necesaria ayuda médica profesional. Es esencial saber cuándo buscar ayuda de un profesional sanitario para evitar complicaciones.
Señales de que debe buscar ayuda médica:
- Dolor y malestar:
Si sientes un dolor agudo, intenso o persistente, es importante que dejes de intentar extraerlo y busques ayuda. El dolor que empeora a pesar de las técnicas de relajación podría indicar que el juguete está alojado de una forma que está causando daños o irritación. - Hemorragia:
Si observa sangrado o manchado después de introducir el juguete, no intente continuar la extracción en casa. El sangrado podría indicar daños internos en los tejidos, y seguir tirando o empujando del juguete podría causar más lesiones. - Incapacidad para alcanzar el juguete:
Si no puedes palpar o alcanzar el juguete después de intentarlo durante unos minutos, puede significar que está alojado a más profundidad de lo esperado. Aunque puede que no sea peligroso de inmediato, lo mejor es consultar con un profesional sanitario para asegurarse de que se extrae de forma segura. - Signos de infección:
Si experimentas hinchazón, fiebre o secreciones que parecen anormales (especialmente si hay un olor desagradable), podrían ser signos de una infección. Si un juguete se queda atascado durante un periodo prolongado, puede aumentar el riesgo de proliferación de bacterias, lo que podría provocar una infección. - Dificultad respiratoria o mareos:
Aunque es poco frecuente, si el estrés o el malestar de la situación provocan mareos intensos, náuseas o problemas para respirar, acuda inmediatamente al médico.
Qué esperar en la consulta del médico
Si se encuentra en una situación en la que necesita asistencia médica, es importante recordar que los profesionales de la medicina están formados para manejar este tipo de situaciones sin juzgar. Tu comodidad y privacidad son una prioridad, así que no tengas miedo de pedir ayuda. Esto es lo que puede esperar:
- Confidencialidad y discreción:
Los médicos y profesionales sanitarios tratan una amplia gama de asuntos personales y están sujetos a acuerdos de confidencialidad. Su situación será tratada con respeto y profesionalidad, así que no tiene por qué sentirse avergonzado. - Examen y extracción:
Una vez en el hospital o la clínica, es probable que un médico realice un examen rápido para evaluar la ubicación del juguete y determinar la mejor forma de proceder. Puede utilizar una herramienta o técnica sencilla para extraer suavemente el juguete. En algunos casos, se puede utilizar anestesia local para que el proceso sea indoloro. En casos más complicados, puede ser necesario un procedimiento mínimamente invasivo. - Cuidados de seguimiento:
En la mayoría de los casos, una vez retirado el juguete de forma segura, el profesional sanitario comprobará si hay signos de lesión o infección. Puede sugerir una cita de seguimiento o dar instrucciones para vigilar su salud después del procedimiento. Si el juguete queda alojado durante un periodo prolongado, puede requerir algún tiempo de cicatrización.
La importancia de actuar a tiempo
Cuando un juguete se queda atascado, los riesgos de dejarlo dentro durante demasiado tiempo pueden aumentar considerablemente. La retención prolongada de un objeto extraño en el interior del cuerpo puede provocar complicaciones como:
- Daño tisular:
Si un juguete se deja dentro durante un periodo prolongado, puede causar daños en los tejidos internos, sobre todo si está hecho de un material que no es compatible con el cuerpo. Esto podría provocar dolor, cicatrices o la necesidad de tratamientos más invasivos. - Riesgo de infección:
Las bacterias proliferan en ambientes cálidos y húmedos, y dejar un objeto extraño dentro del cuerpo puede provocar una infección. Si no se tratan, las infecciones pueden propagarse y provocar problemas de salud más graves. - Síndrome compartimental:
En casos muy raros, la retención prolongada de un objeto extraño puede provocar un aumento de la presión en el interior del recto o el ano, causando una afección conocida como síndrome compartimental. Esto puede provocar una reducción del flujo sanguíneo a los tejidos y, si no se trata, puede causar la muerte del tejido. - Impacto emocional y psicológico:
Si no se resuelve, la experiencia también puede tener efectos emocionales y psicológicos. Es normal sentirse avergonzado o ansioso, pero no buscar ayuda puede prolongar los sentimientos de angustia. Buscar ayuda médica rápidamente puede ayudar a aliviar los problemas de salud física y mental.
Sección 4: Consejos para evitar esta situación
Siempre es mejor prevenir que afrontar una emergencia. Aunque un juguete sexual atascado es poco frecuente, hay medidas que puedes tomar para reducir significativamente las posibilidades de que ocurra en primer lugar. Veamos algunas medidas de seguridad y precauciones a tener en cuenta a la hora de elegir, utilizar y mantener los juguetes sexuales.
Elegir el juguete adecuado
Uno de los factores más importantes a la hora de elegir un juguete sexual es su diseño. Un juguete mal diseñado o que carezca de los elementos de seguridad necesarios tiene más probabilidades de causar problemas.
- Base acampanada y cuerda de recuperación:
Para los juguetes anales y prostáticos, opta siempre por los que tienen una base acampanada o un cordón de recuperación. Así te aseguras de que el juguete no se deslice demasiado hacia el interior. Los masajeadores de próstata, por ejemplo, deben tener una base robusta que puedas agarrar fácilmente. La base acampanada evita que los músculos anales tiren del juguete hacia dentro. - Tamaño y material:
Cuando elijas un juguete, empieza con algo más pequeño y menos intimidante, sobre todo si eres nuevo en el juego anal o prostático. El juguete debe estar fabricado con materiales seguros para el cuerpo, como la silicona médica, el acero inoxidable o el cristal. Estos materiales no son porosos, son fáciles de limpiar y seguros para el cuerpo. - Firmeza:
Los juguetes demasiado blandos a veces carecen del control necesario, lo que puede provocar que se atasquen. Un juguete firme pero flexible ofrecerá un mejor control y una extracción más fácil.
La calidad importa: Invierta en juguetes seguros y no tóxicos
Su salud debe ser su máxima prioridad, así que elija siempre juguetes fabricados con materiales de alta calidad y no tóxicos. Los juguetes baratos y de baja calidad pueden estar fabricados con materiales que pueden descomponerse con el tiempo, provocando riesgos potenciales para la salud.
- Silicona de grado médico:
Es uno de los materiales más seguros y recomendados. No es poroso, lo que significa que no absorbe bacterias, y es fácil de limpiar. Además, la silicona médica es duradera e hipoalergénica. - Acero inoxidable y cristal:
Estos materiales también son excelentes opciones. El acero inoxidable es suave, fácil de desinfectar y tiene la ventaja añadida de no ser poroso. Los juguetes de cristal tampoco son porosos y muchos tienen diseños estéticamente agradables, aunque pueden ser más frágiles. - Evite los ftalatos y otras sustancias químicas nocivas:
Algunos juguetes de baja calidad están fabricados con materiales que pueden contener ftalatos u otras sustancias químicas nocivas. Fíjate siempre en la etiqueta "sin ftalatos" cuando compres un juguete sexual. Los ftalatos pueden ser nocivos y provocar irritaciones o reacciones alérgicas.
La lubricación es la clave
Una lubricación adecuada es esencial tanto para la comodidad como para la seguridad en el uso de juguetes sexuales, especialmente en el juego anal. La lubricación ayuda a reducir la fricción, haciendo que la inserción y la extracción sean más suaves y cómodas. Sin embargo, es importante elegir el lubricante adecuado para evitar contratiempos.
- Lubricantes de base acuosa:
Los lubricantes de base acuosa son versátiles y seguros para la mayoría de los juguetes. Pueden reaplicarse cuando sea necesario y son ideales para usar con juguetes de silicona y goma. - Lubricantes a base de silicona:
Los lubricantes a base de silicona son más duraderos y ofrecen un tacto más suave y deslizante. Sin embargo, no deben utilizarse con juguetes de silicona, ya que pueden romper el material. - Evite los lubricantes a base de aceite:
Los lubricantes a base de aceite pueden degradar el látex y la silicona, haciendo que los juguetes se estropeen con el tiempo. También pueden aumentar el riesgo de infección al alterar el equilibrio natural del pH de la zona vaginal o anal.
Prácticas de juego seguras: Escucha a tu cuerpo
Por último, la mejor forma de evitar un juguete atascado es escuchar a tu cuerpo y practicar técnicas de juego seguras.
- Empieza despacio:
Si eres nuevo en el juego anal o prostático, empieza con juguetes pequeños y tómate tu tiempo. Aumenta gradualmente el tamaño a medida que te sientas más cómodo. - Utilice una lubricación adecuada:
Utiliza siempre abundante lubricante para garantizar una inserción suave y fácil. No te precipites y asegúrate de estar relajada antes de empezar. - Conoce tus límites:
Si sientes alguna molestia, para inmediatamente. Es importante que conozcas tus límites y evites forzarte demasiado. - Comuníquese con su pareja:
Si juegas con un compañero, la clave es una comunicación clara. Asegúrate de que ambos comprenden los límites del otro y se sienten cómodos durante toda la experiencia.
Conclusión: La seguridad primero, el conocimiento después
Aunque es raro que un juguete sexual se quede atascado dentro de ti, es importante saber cómo actuar si alguna vez ocurre. Si eliges los juguetes adecuados, los utilizas de forma segura y eres consciente de las señales de tu cuerpo, puedes reducir el riesgo de que esto ocurra. Recuerda que los juguetes sexuales deben aumentar el placer, no provocar ansiedad. Si no estás seguro o tienes algún problema, no dudes en pedir ayuda a un profesional médico. Tu salud y seguridad sexuales deben ser siempre lo primero.
Sección 5: Preguntas frecuentes
Un juguete erótico atascado puede ser una experiencia aterradora, sobre todo para los principiantes que no están familiarizados con estas situaciones. A continuación, te presentamos algunas de las preguntas más frecuentes sobre los juguetes eróticos atascados. Estas respuestas deberían darte más claridad y tranquilidad.
1. ¿Cómo puedo evitar que mi juguete sexual se atasque?
La prevención es la clave. La mejor forma de evitar que un juguete se atasque es elegir un juguete que tenga una base acampanada o un mango de recuperación, especialmente para el juego anal o prostático. Estas características actúan como barreras que impiden que el juguete se introduzca demasiado en el cuerpo. Además:
- Utilice siempre abundante lubricante para reducir la fricción y facilitar la inserción.
- Empieza con un juguete de menor tamaño y ve aumentándolo gradualmente a medida que te sientas más cómodo con la sensación.
- Evita las prisas: si te tomas tu tiempo y prestas atención a las sensaciones de tu cuerpo, reducirás el riesgo de introducir demasiado el juguete.
2. ¿Puedo quitar un juguete sexual atascado yo solo?
En muchos casos, sí, puedes intentar quitar un juguete atascado por tu cuenta, pero debes abordarlo con cautela. Si el juguete no está muy incrustado y puedes palparlo o alcanzarlo, es posible que puedas extraerlo con cuidado. La clave es mantener la calma y utilizar técnicas de relajación adecuadas. Prueba las siguientes:
- Respira lenta y profundamente para relajar el cuerpo.
- Colóquese de forma que facilite la extracción (en cuclillas o sentado en el inodoro es lo ideal).
- Nunca lo fuerces. Si el juguete no sale con suavidad, es hora de buscar ayuda profesional.
3. ¿Qué ocurre si dejo un juguete sexual dentro durante demasiado tiempo?
Dejar un juguete dentro del cuerpo durante demasiado tiempo aumenta el riesgo de complicaciones como infecciones, daños en los tejidos o incluso trastornos psicológicos. La retención prolongada también puede provocar una enfermedad denominada síndrome compartimentalCuando se acumula presión en el interior del recto o el ano, se restringe el flujo sanguíneo a los tejidos. Retira siempre el juguete lo antes posible. Si no puedes hacerlo de forma segura, busca asistencia médica inmediata.
4. ¿Tendré que ir al hospital si mi juguete sexual se atasca?
No necesariamente. Si mantienes la calma y sigues los pasos de extracción segura descritos anteriormente, es posible que puedas solucionarlo en casa. Sin embargo, si experimenta dolor intenso, hemorragia o no puede alcanzar el juguete, debe acudir al hospital. El personal sanitario está formado para tratar estas situaciones con discreción y experiencia. No te avergüences; es mucho más importante recibir la atención médica que necesitas.
5. ¿El uso de un lubricante inadecuado puede hacer que mi juguete sexual se atasque?
Sí, utilizar un lubricante inadecuado puede empeorar la situación. Si un lubricante no es lo suficientemente deslizante, puede provocar fricción, haciendo que la inserción sea más difícil e incómoda. Por otro lado, un exceso de lubricante puede hacer que el juguete resbale con demasiada facilidad, lo que puede provocar que penetre demasiado profundo. Utiliza siempre la cantidad adecuada de lubricante de alta calidad y asegúrate de que es compatible con el material del juguete (por ejemplo, los lubricantes a base de agua son los más seguros para la mayoría de los juguetes).
Sección 6: Recursos adicionales para un juego seguro
Para los principiantes, la formación continua y el acceso a información fiable son vitales para tomar decisiones con conocimiento de causa. Aquí tienes algunos recursos de confianza que pueden ayudarte a comprender mejor la salud sexual, la seguridad de los juguetes y mucho más.
- Asociación Americana de Salud Sexual (ASHA):
La ASHA proporciona abundante información sobre salud sexual, incluidos consejos para el uso seguro de juguetes sexuales, la importancia de la higiene y la comprensión de las señales del cuerpo.
Página web: https://www.ashasexualhealth.org - Guía de la Clínica Mayo para el juego anal:
Mayo Clinic ofrece consejos de expertos sobre cómo practicar con seguridad el juego anal, incluidos juguetes seguros, técnicas y consideraciones sanitarias.
Página web: https://www.mayoclinic.org - Planned Parenthood - Seguridad de los juguetes sexuales:
Planned Parenthood ofrece consejos sencillos sobre la selección y el uso responsable de los juguetes sexuales.
Página web: https://www.plannedparenthood.org - Recursos sexopositivos:
Para un enfoque más comunitario de la salud sexual, consulta los recursos que promueven una perspectiva sexual positiva y prácticas seguras.
Página web: https://www.sexpositive.com - SIECUS - Consejo de Educación e Información sobre Sexualidad:
SIECUS es una fuente completa de educación sexual, que incluye información detallada sobre salud, seguridad y placer sexuales.
Página web: https://www.siecus.org
Conclusión: Abrazar la exploración segura
Explorar la salud sexual y el placer a través de los juguetes sexuales es una parte natural y saludable de la vida de muchas personas. Sin embargo, es importante conocer los riesgos y saber cómo utilizar los juguetes de forma segura. Si un juguete se atasca, mantén la calma, relájate y sigue los pasos descritos en esta guía. La prevención es la clave y, con los conocimientos adecuados, puedes tomar decisiones informadas que te ayudarán a mantener tu exploración sexual segura y placentera.
Recuerda que la salud sexual no es sólo placer, sino también confianza, información y seguridad. Siguiendo unas pautas de seguridad, eligiendo los juguetes adecuados y comprendiendo los límites de tu cuerpo, puedes asegurarte de que tus experiencias sean positivas y estén libres de riesgos.
Si tienes alguna pregunta o duda, no dudes en acudir a un profesional médico. La salud sexual debe ser una cuestión de empoderamiento, y buscar ayuda es una señal de que estás tomando el control de tu cuerpo y tu bienestar.
Referencias:
- Salud prostática y juego seguroAsociación Americana de Urología. Disponible en Directrices de la AUA
- Salud y seguridad sexualAsociación Americana de Salud Sexual. Disponible en ASHA
- Guía de seguridad para el juego anal, Clínica Mayo. Disponible en Clínica Mayo
- Materiales seguros para el cuerpo en los juguetes sexualesPlanned Parenthood. Disponible en Planned Parenthood
- Lubricación para un juego sexual seguroHealthline. Disponible en Healthline
- Manejo de emergencia de cuerpos extraños rectalesJournal of Emergency Medicine. Disponible en PubMed
Descargo de responsabilidad médica:
Este blog proporciona información general y no sustituye el asesoramiento médico profesional. Si tiene algún problema o complicación de salud, consulte inmediatamente a un profesional sanitario.